Dejemos a un lado el doping del ciclismo, pues pienso que todos van igual de "cargaditos" y pensemos en la ley de la carretera nada más. En cualquier disciplina de deporte de élite, sea la que sea, (incluso golf o curling)llegar a la cima de éste, ser el mejor y mantenerse unos años está sólo reservado para unos pocos.
En el mundo del ciclismo lo que ha hecho el americano Lance Armstrong es digno de muchísimo respeto y admiración. Ganó un mundial de ruta con 21 años, entró en un cáncer testicular (con el nombre de CANCER en la mayor extensión de la palabra) del que salió airoso, y se dedicó a ser el mejor hombre Tour de la historia. Repito dejemos casos de doping a un lado.Se retira por cansancio mental, aburrimiento, falta de competencia en todo el planeta...y tras tres años de fiestas, escribiendo libros, corriendo algún maratón, se prepara y con 37 años vuelve al ciclismo. Perdón vuelve a la élite del ciclismo. Y corre en dos meses Giro de Italia y Tour. En Italia acaba undécimo (si se confirma el caso Di Luca) y en el Tour tercero. El, ambicioso, dice que volverá mejor preparado. Mejor? Me parece una pasada lo que ha hecho sabiendo que además se rompió la clavícula en la vuelta a Castilla-Leon con lo que eso le habrá trastocado sus entrenos. O es un fenómeno como deportista o los ciclistas de hoy día están muy verdes (quitando dos o tres).
Y ojo que desde Perico, no había vuelto a ser fan de un ciclista español al que y vaticiné ("El renacimiento de ciclismo español" -2007-) antes de que ganara nada mediático como uno de los mejores de los próximos años. Creo que a día de hoy, está Contador, luego nadie, luego nadie, luego Armstrong, Andy Schleck y Valverde y luego muy, muy ,muy lejos, el pelotón.