Los rectores del fútbol inglés, con profunda visión de marketing, ven en estas fechas el marco idóneo para que los 'supporters' acudan al fútbol en familia. Más gente=más ingresos. Así, hay tres jornadas en ocho días, desde hoy mismo, 26 de diciembre (el llamado 'Boxing Day'), hasta el 2 de enero. Las familias se reúnen después de pasar todo el año separadas, en la que cada día festivo conserva una pequeña tradición a la que dar cumplimiento, el fútbol, principal entretenimiento de los ingleses, cobra un especial protagonismo.
En estos días no queda ningún estadio que no complete su aforo y las gradas acogen muchos más niños que en el resto de partidos del año. La vorágine de partidos que se inicia el fin de semana previo al día de Navidad y que no concluye hasta pasado año nuevo suele ser además propicia para las sorpresas. Es muy poco frecuente que un equipo consiga sumar todos los puntos posibles en sus compromisos navideños. La cercanía en el tiempo entre un encuentro y otro imposibilita un período de recuperación adecuado y disminuye la concentración de los jugadores, por lo que no resulta infrecuente ver morder el polvo a los grandes en estas fechas.Pero nadie se queja. Futbolistas, entrenadores y aficionados sólo se preocupan de disfrutar de estas fechas haciendo lo que más les gusta. No cabe duda de que Inglaterra es sumamente especial, pero ¿sería esto posible en un país como España, con una afición al fútbol tan entregada como la española? ¿Merecería un esfuerzo por parte de los profesionales del fútbol en nuestro país? A estas alturas, cuando los Gerrard, Lampard o Cesc Fabregas velan armas para las jornadas que se avecinan, una buena parte de los futbolistas de nuestra Liga muy probablemente se encuentren ya de vacaciones en algún lugar exótico con temperaturas tropicales, maldiciendo el día en el que tendrán que volver al trabajo cuando pasen las fiestas navideñas. Qué diferencia.
En estos días no queda ningún estadio que no complete su aforo y las gradas acogen muchos más niños que en el resto de partidos del año. La vorágine de partidos que se inicia el fin de semana previo al día de Navidad y que no concluye hasta pasado año nuevo suele ser además propicia para las sorpresas. Es muy poco frecuente que un equipo consiga sumar todos los puntos posibles en sus compromisos navideños. La cercanía en el tiempo entre un encuentro y otro imposibilita un período de recuperación adecuado y disminuye la concentración de los jugadores, por lo que no resulta infrecuente ver morder el polvo a los grandes en estas fechas.Pero nadie se queja. Futbolistas, entrenadores y aficionados sólo se preocupan de disfrutar de estas fechas haciendo lo que más les gusta. No cabe duda de que Inglaterra es sumamente especial, pero ¿sería esto posible en un país como España, con una afición al fútbol tan entregada como la española? ¿Merecería un esfuerzo por parte de los profesionales del fútbol en nuestro país? A estas alturas, cuando los Gerrard, Lampard o Cesc Fabregas velan armas para las jornadas que se avecinan, una buena parte de los futbolistas de nuestra Liga muy probablemente se encuentren ya de vacaciones en algún lugar exótico con temperaturas tropicales, maldiciendo el día en el que tendrán que volver al trabajo cuando pasen las fiestas navideñas. Qué diferencia.
En el deporte la época navideña no es motivo de parada, es un punto importante en la mayoría de la planificación de los deportes. Qué sería de un atleta que detiene sus entrenamientos y competiciones quince días en estas fechas en plena época de campo a través y en la antesala de la pista cubierta. No sólo eso sino que llegan las interesantes y populares San Silvestres. Qué sería de un ciclista que se encuentra en plena pretemporada, sabiendo que en febrero comienza la vorágine de las rondas iniciales. La NBA no hace guiños al descanso sino que mantiene su calendario imparable de un día partido y dos de descanso o viaje. Los tenistas que han concluido hace nada su infernal circuito, toman unos días de asueto para rápidamente preparar el abierto de Australia que se encuentra a la vuelta de hoja de calendario. En un año próximo de carácter olímpico, los profesionales del deporte y los no tan profesionales no paran, siguen su trabajo. Otro caso diferente es la de nuestros queridos futbolistas de LFP. Por convenio colectivo deciden detener la Liga dos jornadas por necesidad física y psicológica, para estar con los suyos aquí y al otro lado del charco...pero más de uno aprovecha para jugar pachanguitas con sus selecciones autonómicas o jugar un 'amigos de Aragonés contra amigos de Di Stefano'. Nadie se da cuenta de lo ideal que sería emular la Premier y aprovechar más jornadas de liga en estás épocas donde los niños tienen más tiempo para ir a los estadios. Pues no, es mejor esperar a que se reanuden las clases y poner partidos a las diez de la noche, horario genial para que un niño de 9 o 10 años asista al campo de sus ídolos y vuelva a su domicilio pasadas las doce y media de la noche. Profesionalismo futbolístico español?
2 comentarios:
100% de acuerdo. nada que añadir.
¿Serà el motivo por el que no pasemos de cuartos?
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